martes, 29 de enero de 2013

CAPITULO 3 - Página 2


Tape mi cicatriz y con rapidez cogí el abrigo junto al maletín.
- P..Primo no intentaras irte sin explicarme eso ¿verdad? - dijo David sin casi articular palabra.
- Debo darme un vuelta primo, lo siento... - dije con voz nerviosa.
Salí de casa y me fui dirección a la parte antigua, la noche cacereña había bañado el cielo, las luces y el ambiente cacereño de esa noche hacia transportar a cualquiera a otra dimensión, a otra época, me pare en una pared rocosa bajo una farola que parecía estar casi fundida.

 - Aquello fue algo que debería olvidar... - dije apoyándome en la pared cayendo poco a poco hacia abajo quedando sentado en el frío suelo empedrado de los Adarves cacereños.
- Todo lo que he hecho ¿no ha servido de nada?, no he conseguido en estos años más que dolor, quizás es hora de olvidar todo y empezar la vida que debería llevar, quizás sea la hora de dejar de ser detective, dejar de luchar por nada...
Entonces como si fuese un dolor profundo de cabeza retumbaron en mi cabeza las palabras del hombre misterioso. 
Para...para... ¡CÁLLATE! ¡¡CÁLLATE!! - dije con los ojos llorosos sin poder olvidar esa voz que retumbaba en mi cabeza como si fuese una bomba de relojería.
Mi cabeza solo retumbaba una frase, una oración que no olvidaba nunca desde esa tarde "La respuesta a la primera de tus preguntas no está aquí, no está en este tiempo".
¡¡¡Maldita sea, ¿es que nunca voy a encontrarte hijo de puta?!!! - dije gritando desesperado, un grito sordo en las murallas escondidos...
Entonces caí en la solución, saque de mi maletín un papel y un bolígrafo, nervioso empecé a escribir.
Pasado - Año 2012, Presente - Año 2022.
¡Esta es la solución! Es un juego de palabras, el pasado es el año 2012 donde aún éramos jóvenes e inocentes, el asesinato ocurrió en 2018... ¡La puta solución ha estado delante de mí todo este tiempo! - Grite tirando el maletín más allá de donde me encontraba.
El Pasado se refiere a cuando murieron mis abuelos, las respuestas están en el Restaurante Serrano Cano, es hora de viajar de nuevo - dije con gran seriedad.
Un poco más tranquilo recogí todo y me fui a casa de mi primo, sin mediar palabra me fui a mi habitación e intente dormir tirando todo sobre la mesilla, el móvil se encendió automáticamente, la pantalla tenía un texto "Hoy es Jueves Santo"...