sábado, 12 de enero de 2013

CAPITULO 2 - Pagina 4

Dormí gran parte de la tarde pero sobre las 19:30 horas una llamada me despertó, pensé que era una llamada más.
- ¿Diga? - dije aturdido de tanto dormir
- ¿Es usted Sergio Cano? - dijo una extraña voz
- Si...y usted? ¿Quien es? - dije tras sorprenderme de que alguien supiera tan siquiera mi nombre tras tantos años
- Lo se todo sobre usted, nos podríamos reunir más tarde en la Plaza del Triunfo, debo hablar con usted de algo muy importante... - dijo aquella extraña voz con gran seriedad.

 - ¿Importante? ¿Plaza del Triunfo? ¡De que me esta hablando! Oiga si esto es una broma no tiene gracia y estoy rastreándole el móvil en este momento ¡Asi que diga quien es! - dije amenazante
- ¿Usted se cree que soy idiota? ¿Cree realmente que este móvil iba a ser mio? La Plaza del Triunfo es la antigua Plaza Marrón reformada, le espero en el café San Miguel en media hora, si no esta algo malo pasará - Dijo la voz con cierto tono siniestro
- ¡Que! - dije con los ojos abiertos y sin dar crédito - Oiga...¿Oiga? ¡¡Maldita sea ha colgado!!
Me tumbe en la cama y pensé ¿deberia ir o no? y lo más importante ¿quien esta tras esa llamada?...Sea como sea debía ir porque algo cercano a mi estaba en peligro.
Salí de la cama, me vestí, cogí una pistola que solía llevar encima, la licencia de armas estaba enrollada en la maleta junto a mi ropa y salí de mi habitación, la casa estaba aparentemente vacía, ni las chicas ni mi primo estaba, que estará pasando...mire el reloj
- ¿Como? Son las 19:30...he dormido una siesta de seis horas, como es posible...no debería darle mucha importancia...David estará comprando la cena supongo. - dije sin mucha confianza en lo sucedido
Abrí la puerta y la cerré con llave como era tradición, fui caminando por las calles de Cáceres pensando que algo pasaría si no llegaba, me preocupaba más que alguien supiera mi identidad a que pasara algo, mi identidad fue borrada hace 5 años, no era normal esto...Poco a poco llegue al café San Miguel.
El Café San Miguel era una antigua churrería de una familia que poco a poco se convirtió en una Chocolatería - Café para desayunar y para merendar. Pregunte al chico que estaba en la amasadora de churros.
- Perdona..¿sabes si alguien esta esperando a alguien? - dije esperanzador de una respuesta que aclarase mi duda
- ¿Esta usted de broma? Aquí viene mucha gente esperando gente. - dijo el chico con cierto tono arisco
Al mirar a mi alrededor vi un montón de parejas tomando café y una mesa al fondo con un hombre de aspecto misterioso.
El hombre llevaba una especie de capa española, una mascara y un sombrero, parecía venido del carnaval veneciano.
- ¡Quien es usted! - dije amenazante ¿¡Usted me ha llamado!?
- Si, veo que tienes agallas niño.. - dijo la voz sin levantar la mirada del café.
- No me llames niño y dime quien eres - dije de nuevo
- Jaja...que me vas a hacer mocoso, ¿intentar dispararme con tu pistola de mierda? - dijo tomando un sorbo del café en el gran hueco de su boca.
- ¡Camarero ponle un capuccino al chaval! - dijo en un tono más amable.
- ¿C...Como?... - dije muy aturdido sentándome de golpe en la silla
- Ja...ya no eres tan amenazante eh enano. Te diré algo niñato, deja de investigar lo que no te importa - dijo la voz amenazándome
- Que sabes tu de mi investigación, como sabes tanto de mí - dije con cierta curiosidad a la par que vacile.
- Ja...¿que como lo sé? Por que tengo contactos...has averiguado demasiado ¿verdad? - dijo la voz soplando lo que quedaba de la espuma del capuccino.
- Su capuccino señor - dijo el camarero.
Al dejarme el capuccino di un salto hacia atrás muy asustado.
- Que pasa...¿no te gusta las imagenes que hacen con canela en la espuma del capuccino? - dijo riéndose
- Esta figura...que sabes tu de aquello maldita sea ¡Por que te tapas con esa careta sonriente! ¡Quitatela y hablame frente a frente! - dije gritandole
- Jaja calmate niño, no me gusta que me griten ¿entiendes? - dijo totalmente calmado, como inmune a mi enfado.
- Por que me has llamado...no te preguntare como has conseguido mi número porque es absurdo hacerlo. - dije intentando obtener una respuesta.
- Por que tu quieres saber y yo sé - dijo haciendo un juego de palabras. En otras palabras, tu quieres saber que paso y yo sé lo que paso.
- ¿Que sabes lo que paso? ¡No digas tonterías! - dije indignado
- Lo sé todo sobre ti y se todo lo que paso...pero como te gusta investigar, juguemos a ser detective ¿vale? - dijo vacilandome
- ¿No me gusta que me vacilen entiendes? Dime quien eres, dímelo ya ¡Joder! - dije desesperado
- Pierdes los papeles con un desconocido, jaja, la respuesta esta en esta ciudad, todo lo que te falta en tu investigación, esta aquí...¿Quieres jugar a este juego?
- ...¿Por que haces esto? Eres alguien cualquiera que no tiene relación alguna con mi familia - dije sin tranquilizarme del todo
- ¿Que por que hago esto? Simple y pura diversión, es muy fácil, si consigues resolver el misterio, tú ganas y consigues que tus amiguitos los polis hagan su trabajo, pero si tú pierdes...si tu pierdes este juego será más gracioso aún - dijo tras esa fría mascara blanca.
- ...asi que quieres jugar conmigo eh, vaya tonteria, esta conversación ha acabado - dije levantandome de la mesa y antes de poder dar un paso adelante...
- Vaya...cinco años tirados a la basura...tiene a tu criminal en bandeja y no quieres tomar mi consejo, te diré una cosa, la respuesta a la primera de tus preguntas no esta aquí, no esta en este tiempo. - dijo con gran seriedad el enmascarado.
- ¿En este tiempo?...¡En que tiempo esta la respuesta! - dije volviéndome para atrás sin éxito...el hombre ya no estaba ahí, mire por todos lados del café y no estaba era como si se hubiera esfumado...
- ¿La primera de mis preguntas no esta en este tiempo? ...en que tiempo maldita sea...
Dije mirando con gran desafío al capuccino que seguía igual que cuando lo trajo el camarero, con su espuma y su figura, la figura del león, el símbolo de nuestra familia, que parecía roto por el centro a conciencia....sea como sea, debía averiguar en que tiempo estaba mi respuesta.